La frase fue vertida por el Presidente durante la última reunión de Gabinete. El malestar con los mandatarios provinciales es porque se oponen a la suba de retenciones impulsada en la Ley Ómnibus.
Pese a la firma del dictamen de la Ley Ómnibus en la Cámara de Diputados, en el Ejecutivo reina el malestar con los gobernadores por la resistencia a la suba de las retenciones.
Los legisladores que responden a los mandatarios provinciales acompañaron el dictamen en general, pero con disidencias. A ello se sumó la polémica de las últimas horas por el supuesto cambio en el dictamen.
Desde un comienzo en la negociación, los gobernadores plantearon su oposición al aumento de los derechos de exportación.
En efecto, y sin certezas respecto a la media sanción que todavía se dilata, el ministro de Economía, Luis Caputo, advirtió con “un ajuste mayor”.
Pero la declaración más resonante se dio este jueves en Casa Rosada, donde Javier Milei reunió a su Gabinete.
Allí, Milei prometió reducir las partidas que se transfieren a las provincias. Una amenaza que había anticipado días atrás el vocero Manuel Adorni.
“Los voy a dejar sin un peso”, aseveró el jefe de Estado, ante sus funcionarios.
A todo esto, Caputo y Federico Sturzenegger reunieron a empresarios para sumar músculo y mostrar el respaldo del círculo rojo a la normativa.
De todos modos, la discusión crucial se dará la próxima semana en el Congreso.
