En la convención D23 de Brasil, Disney ha confirmado que la nueva película de la saga está en desarrollo con el regreso de sus principales protagonistas.
Corría el año 2002 cuando Blue Sky Studios sorprendía con ‘Ice Age. La edad de hielo’, cuyo éxito abrió paso a una saga que se extendió durante catorce años. Pero estirar el chicle tuvo sus consecuencias y aunque ‘Ice Age 2. El deshielo’ y ‘Ice Age 3: El origen de los dinosaurios’ mantuvieron el tipo, con la cuarta (‘Ice Age 4: La formación de los continentes’) el desgaste fue más que evidente y con la quinta (‘Ice Age 5: El gran cataclismo’) parecía que se ponía fin definitivamente a la franquicia.
Han pasado ocho años de aquello. Tras la absorción de Blue Sky Studios por parte de Disney ya tuvo lugar una intentona por resucitar aquello con el spin-off ‘Ice Age: Las aventuras de Buck’, lo cual no salió bien. Pero como la esperanza es lo último que se pierde, la factoría ha confirmado una sexta entrega de la saga que llegará en 2026.
Lo cierto es que en septiembre John Leguizamo, quien da voz al perezoso Sid, ya revelaba que la nueva secuela estaba en desarrollo y que estaba «muy feliz» por ello. Ha sido en la convención D23 de Brasil donde Disney ha hecho el anuncio oficial mediante un vídeo con Leguizamo y el resto de protagonistas confirmando así que todos están de vuelta (o casi todos).
Así, junto a Sid regresarán los mamuts lanudos Manny y Ellie, a los que dan vida Ray Romano y Queen Latifah, el tigre dientes de sable Diego (Denis Leary) y Buck (Simon Pegg), la comadreja cazadora de dinosaurios que apareció en las últimas entregas. Hay, no obstante, una gran ausencia: la de Chris Wedge, la ardilla prehistórica con dientes de sable que está dispuesta a todo por su bellota.
Saga de millones
Entre las cinco anteriores entregas esta franquicia ha superado los 3.200 millones de dólares en taquilla. Su mayor éxito fue ‘Ice Age 3’, que obtuvo una recaudación de 886,7 millones de dólares. La quinta y hasta ahora último, sin embargo, se tuvo que conformar con menos de la mitad, quedándose en los 408,5 millones.
Fuente: Ecartelera