El dirigente social Luis D´Elía dijo en su editorial que “las Madres, que son la reserva moral de la Nación, nos convocan a pelear, a ponernos de pie; nos convocan a la dignidad, nos convocan a decir que no, nos convocan al 17 de octubre”.
EDITORIAL DE LUIS D’ELÍA: UN PUEBLO CONSCIENTE, UN PUEBLO CON CONVICCIÓN ES INVENCIBLE, ES IMPARABLE.
El Pueblo argentino, en los peores momentos de la historia frotan la lámpara, se mete en esa caverna larga, profunda de la memoria y saca lo mejor de sí con los mejores personajes. Por eso, en medio de esta tempestad donde la deuda externa, el Fondo Monetario Internacional, la derecha oligárquica se han puesto repasador al cuello y han agarrado cuchillo y tenedor para comerse la Argentina entera. Bueno, el Pueblo, a través de las Madres, que son la reserva moral de la Nación, nos convocan a pelear, a ponernos de pie; nos convocan a la dignidad, nos convocan a decir que no, nos convocan al 17 de octubre. Es un tiempo de fractura con la opresión, con el oprobio, con la indignidad, con la mierda. Por eso, el domingo a las 16 horas vamos a estar todos en la Plaza de Mayo, vamos a marchar unidos como podamos. Me gustaría ver un torrente de Pueblo, me gustaría ver a miles y miles de personas movilizadas de pie diciéndole a la oligarquía y al imperio en la cara: “no pasarán”.
Bueno, acá estamos. Hubo muchas idas y vueltas, hubo mucha cosa rara, intento de manipular, de manosear. Pero nadie puede manipular o manosear la voluntad de un Pueblo, asique vamos a estar en la calle junto a Hebe, junto a las Madres para decirle al Fondo Monetario Internacional, a los buitres, a la política exterior de los E.E.U.U., al Círculo Rojo: no pasarán. Acá estamos dispuestos a hacer nuestra voluntad, estamos de pie y no vamos a aceptar que nada ni nadie nos cambie el rumbo. Por eso, está bueno que en este acto rebelde, en este acto donde hemos ido contra todo y contra todos nos hayamos autoconvocado.
Hoy conmueve la autoconvocatoria, todos los sectores han salido a decir “nosotros vamos”. Está buenisimo, los demás que hagan lo que sientan que tienen que hacer. Nosotros, el Pueblo más genuino, el Pueblo que resistió el oprobio de la dictadura, que se bancó 40 años de neoliberalismo, el mismo Pueblo que terminó con Menem, que terminó con De la Rúa, que terminó con Macri. Bueno, es ese Pueblo que está ahí y que no lo puede torcer ni la decisión de Héctor Magnetto, ni la decisión del Grupo Clarín, ni el Grupo La Nación, ni el Grupo América, nada, nada nos puede parar somos imparables.
¿Y qué tenemos? ¿Tenemos plata, tenemos aparato, tenemos cargos, no tenemos un carajo? Lo que tenemos es convicción y conciencia. Un Pueblo consciente, un Pueblo con convicción es invencible, es imparable. Y yo no sé por qué pero siento que el domingo va a ser un gran día, va a ser otro 17 de octubre. Me crié con la imagen fuerte de mi viejo y mi vieja que jovencitos, 17 uno y 18 el otro, dos pibes de los conventillos del barrio San Cristóbal se fueron de la mano a la Plaza de Mayo porque había caído preso el General y había que liberarlo. El General de los derechos laborales, el General que de la Secretaría de Trabajo y Previsión había hecho una tarea impresionante con los sindicatos, con los trabajadores, con el Pueblo, con sus derechos. Bueno, el General fue liberado, aquel 17 de octubre de 1945.
Este 17 de octubre la Patria va a ser liberada, hay que liberar la Patria. Entonces que nadie me venga con el día de la madre, que nadie me venga con cosas raras. Hay que liberar a la gran madre de todos/as que es la Patria de las y los argentinos. Un domingo dedicado a la Patria y al Pueblo, sacando afuera lo mejor de todos nosotros. Yo voy a estar ahí, voy a estar ahí presente con mis años de cárcel, con la persecución, con las noches mirando las ventanas del calabozo, con el dolor inmenso de no tener a Néstor Kirchner, con el dolor inmenso que significa la incoherencia y la incongruencia de algunos, con el orgullo enorme de ser parte del Pueblo argentino, que es todo mi capital. El domingo nos vemos en la Plaza. Si alguien no va, que no me escuche más. Abrazo grandote, los quiero mucho.
