La Justicia comprobó que el único joven que declaró, no estuvo en Villa Gesell la noche del asesinato. Dos de los rugbiers fueron imputados por un delito que prevé prisión perpetua.
La fiscal Verónica Zamboni ordenó liberar este martes a Pablo Ventura, el detenido número once por el asesinato de Fernando Báez Sosa el pasado sábado en Villa Gesell.
Ventura había sido aprehendido después de que el grupo de rugbiers lo involucrara en el crimen de Fernando.
Sin embargo Ventura, quien fue el único en prestar declaración, nunca había estado en Villa Gesell, hecho que se constató.
Asimismo, la fiscal acusó a dos de los rugbiers Maximiliano Thomsen y Ciro Pertossi, de “homicidio agravado por el concurso premeditado de dos o más personas”, delito que prevé prisión perpetua.
Los otros ocho imputados fueron considerados “partícipes necesarios”.
La Justicia de Garantía solicitó el traslado de los rugbiers a una unidad carcelaria. Hasta el momento, cinco de ellos permanecían en una comisaría de Villa Gesell, y el resto en una dependencia policial de Pinamar.
Fuente: ANDigital
