Un estudio del Centro de Economía Política Argentina (CEPA) revela una caída real del gasto total del -31% durante los primeros nueve meses de 2025. El ajuste afecta áreas sociales, educativas y productivas, mientras Inteligencia muestra un incremento del 35%.
Un informe del Centro de Economía Política Argentina (CEPA) sobre la ejecución presupuestaria de la Administración Pública Nacional (APN) muestra un ajuste histórico: entre enero y septiembre de 2025 el gasto total cayó -31% en términos reales respecto al mismo período de 2023.
El estudio —publicado en la web del CEPA— detalla que los recortes más severos se concentran en áreas sociales, educativas, científicas y de infraestructura, mientras que la Secretaría de Inteligencia del Estado incrementó su ejecución en un 35%.
Salud, educación y desarrollo: los sectores más golpeados
Los servicios sociales sufrieron una caída del -21%, con reducciones drásticas en programas clave como Conectar Igualdad y el Fondo Nacional de Incentivo Docente (FONID), ambos sin ejecución en 2025.
La Superintendencia de Servicios de Salud registró una baja del -70%, mientras hospitales nacionales y organismos como el Instituto Malbrán (-22%) y la ANMAT (-28%) también fueron alcanzados por los recortes.
En educación, además de los programas sin ejecución, se destacan caídas del -89% en Fortalecimiento Edilicio de Jardines Infantiles y del -77% en Becas y Gestión Estudiantil.
Ciencia, tecnología e infraestructura casi paralizadas
El área de Ciencia y Tecnología muestra una contracción generalizada: el Programa de Promoción de la Investigación e Innovación cayó un 83%, el CONICET un 30% y el Servicio Meteorológico Nacional un 35%.
En infraestructura, la situación es crítica: vivienda y urbanismo retrocedieron un 99%, mientras programas de obra pública, pavimentación y construcción de puentes presentan reducciones de entre -93% y -100%, según el CEPA.
Contraste: Inteligencia en alza y deuda con peso constante
Mientras las áreas sociales y productivas sufren ajustes masivos, la Secretaría de Inteligencia del Estado, dependiente de Presidencia, aumentó su gasto en un 35%, en contraste con la tendencia general.
En tanto, los Servicios de Deuda Pública bajaron un 39% en términos reales, aunque mantienen un peso del 9% sobre el gasto total.
Riesgo para la continuidad de políticas públicas
El CEPA advierte que el escenario “compromete la sostenibilidad de políticas esenciales en salud, educación, ciencia y desarrollo social”. Además, las transferencias a provincias y municipios —clave para la gestión local— muestran caídas de hasta el 100%, afectando la gobernanza federal.
Conclusión
La reducción real del gasto público 2025, según el CEPA, refleja un ajuste de magnitud inédita, con impactos directos sobre los programas que sostienen el bienestar social y el desarrollo productivo del país. El contraste entre el crecimiento de Inteligencia y la caída en servicios básicos plantea un panorama de fuertes tensiones sobre el rol del Estado y la orientación del gasto público.