En un nuevo episodio de criminalización de la solidaridad, el Estado de Israel detuvo y trasladó a prisión a los 473 activistas de la Flotilla Global Sumud, que intentaban romper el bloqueo marítimo a Gaza con una misión humanitaria internacional. La prisión de Saharonim, en el desierto del Neguev, fue el destino final de esta acción represiva, mientras crecen los reclamos por su liberación inmediata.
El operativo represivo se desplegó tras el intento humanitario de romper el bloqueo a Gaza.
Más de 470 activistas humanitarios de la Flotilla Global Sumud fueron trasladados por las autoridades israelíes a la prisión de Saharonim, ubicada en el desierto del Neguev, tras haber sido interceptados en alta mar por intentar romper el bloqueo marítimo impuesto a la Franja de Gaza.
El equipo jurídico de la Flotilla confirmó que el número exacto de detenidos asciende a 473 personas, coincidiendo con la cantidad de tripulantes y pasajeros a bordo al momento del abordaje por parte de la Armada israelí. Esta operación represiva comenzó el miércoles por la noche y se extendió durante al menos doce horas.
⭕💥Miembros de la Flotilla Global Sumud, secuestrados por Israel en aguas internacionales, serán trasladados a una de las cárceles de tortura más infames de Israel. La prisión de Ketziot, en el desierto del Néguev, ha sido escenario de repetidos abusos contra presos palestinos. https://t.co/DCW2xXbvxh
— Graciela E. Tzanikian 🇦🇲 Կրասիելա (@GraArmenia1958) October 3, 2025
Interceptación, fichaje y prisión: un operativo coordinado
Tras ser interceptados, los barcos fueron llevados al puerto de Ashdod, donde los activistas fueron fichados por la policía y sometidos a trámites migratorios. Posteriormente, fueron conducidos en autobuses hasta la prisión de Saharonim, ubicada cerca de la frontera con Egipto, en la localidad de Kziot.
La prisión fue diseñada originalmente para alojar a inmigrantes en situación irregular en Israel, pero en esta ocasión alberga a cientos de activistas internacionales que intentaban llevar ayuda humanitaria a la población palestina de Gaza. Algunos de los activistas serán deportados directamente desde el aeropuerto, mientras que otros enfrentarán un proceso judicial para decidir su expulsión.
Un último barco en alta mar y el cerco militar
De los más de 40 barcos que componían la Flotilla, el único que logró continuar su curso temporalmente fue el Marinette, que fue interceptado este viernes. La acción naval israelí logró desactivar toda la flotilla antes de que pudiera acercarse al enclave bloqueado.
Israeli soldiers have boarded the Marinette of the #GlobalSumudFlotilla and taken the activists captive.
The livestream ended abruptly after a soldier smashed the camera upon boarding. 🚢🇵🇸 pic.twitter.com/mQia5ZklY4
— Global Sumud Flotilla (@GlobalSumud) October 3, 2025
Según el equipo de abogados que representa a los activistas, la detención y traslado violan normas del derecho internacional humanitario, ya que la misión de la Flotilla era pacífica y con fines solidarios, destinada a visibilizar el impacto del bloqueo israelí sobre la población civil palestina.
Denuncia internacional y llamado urgente
Organizaciones de derechos humanos y sectores sociales de distintos países han comenzado a exigir la liberación inmediata de los activistas y la garantía de su integridad física. Aún no se ha confirmado si entre los detenidos hay ciudadanos de países latinoamericanos.
El bloqueo a Gaza, vigente desde 2007, ha sido duramente criticado por organismos internacionales que lo consideran una forma de castigo colectivo a la población civil. Las Flotillas de la Libertad, organizadas periódicamente, buscan romper ese aislamiento mediante acciones no violentas de desobediencia civil internacional.