Siete movimientos políticos y sociales de Sri Lanka solicitaron a la ONU actuar para evitar una invasión de Estados Unidos a Venezuela bajo el pretexto del narcotráfico. Denuncian el riesgo de un conflicto global y reclaman respeto a la soberanía latinoamericana.
Siete organizaciones políticas y sociales de Sri Lanka solicitaron a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) que adopte medidas urgentes para impedir una posible invasión militar de Estados Unidos a Venezuela, denunciando que se estaría preparando bajo el pretexto de la lucha contra el narcotráfico.
En una carta dirigida al secretario general de la ONU, António Guterres, los firmantes subrayaron la “responsabilidad sagrada e ineludible” del organismo internacional en la defensa de la paz y la seguridad mundial.
Denuncias de manipulación y amenaza a la paz
Las organizaciones alertaron que el plan estadounidense se apoya en acusaciones sin pruebas creíbles sobre presuntos vínculos del gobierno de Nicolás Maduro con el narcotráfico. Recordaron, además, que informes —incluido uno de la propia Administración de Control de Drogas (DEA)— desmienten la participación de las autoridades venezolanas en ese tipo de actividades.
Los movimientos también citaron el Informe Mundial sobre Drogas 2025, que identifica a Estados Unidos como el mayor mercado ilícito del planeta, con redes internas consolidadas y un fuerte flujo de dinero lavado dentro de su economía.
“América Latina y el Caribe son Zona de Paz”
Las agrupaciones recordaron que en 2014, los 33 Estados miembros de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) proclamaron la región como Zona de Paz, un principio que —según advirtieron— “no puede ser vulnerado por intereses hegemónicos”.
“Un ataque contra Venezuela pondría en riesgo no solo a América Latina, sino a la estabilidad global”, señala la carta enviada a Guterres.
Los firmantes, entre ellos el Foro Nacional Antiimperialista, el Frente Nacional de la Libertad, el Partido Comunista de Sri Lanka y el Frente de Izquierda Democrática, exhortaron a la ONU a actuar con urgencia para evitar una escalada bélica que podría tener consecuencias imprevisibles.
Críticas a la política exterior estadounidense
Los movimientos denunciaron las operaciones militares y ejecuciones extrajudiciales realizadas por la armada estadounidense cerca de las costas venezolanas, y destacaron la “notable moderación y paciencia” mostrada por el gobierno de Caracas frente a estos actos de provocación.
También condenaron la entrega del Premio Nobel de la Paz 2025 a la dirigente opositora María Corina Machado, calificándola como “una señal política alineada con los intereses de Washington”.
“Otorgar un Nobel a quien ha pedido públicamente una invasión militar contra su propio país es un insulto a la paz y a la ética internacional”, advirtieron.
Conexiones cuestionadas y denuncias de injerencia
Las organizaciones señalaron además los vínculos de Machado con grupos narcoparamilitares colombianos, entre ellos sectores asociados al expresidente Álvaro Uribe, así como su apoyo moral a grupos violentos responsables de disturbios y asesinatos en Venezuela.
A juicio de los firmantes, estas relaciones reflejan la estrategia de desestabilización política impulsada por Estados Unidos en América Latina, “mediante sanciones, operaciones encubiertas y manipulación mediática”.
El comunicado concluye con un llamado a preservar la soberanía venezolana y a reforzar la cooperación entre los países del Sur Global, en defensa del multilateralismo, la autodeterminación y la paz mundial.
