El tope del precio de los servicios públicos subirá hasta las 3.549 libras esterlinas en octubre. El aumento pone en riesgo las finanzas de los británicos ya golpeados por la creciente inflación. El director de EDF Energy, Philippe Commaret, pronosticó que en enero más de la mitad de los hogares van a sufrir «pobreza energética».
El regulador energético independiente del Reino Unido Ofgem anunció este viernes el tan temido y esperado aumento del tope tarifario del gas y la electricidad, que aumentará un 80% a partir de octubre para el año calendario y pondrá en grave riesgo las finanzas de muchos británicos ya golpeados por la crisis del costo de vida debido a la creciente inflación que afecta a la isla.
La Ofgem confirmó que el tope del precio de las tarifas de los servicios de energía subirá hasta las 3.549 libras esterlinas (unos 4.190 dólares en los 12 meses siguientes) en octubre.
El tope será casi el triple de lo que era un año antes, un cambio que hundirá a muchos hogares en la pobreza.
Tanto el Gobierno como Ofgem culparon a Vladimir Putin, ya que Rusia busca aumentar los precios del gas en un intento por romper el apoyo occidental a Ucrania en su invasión. «Han cortado lenta y deliberadamente el suministro de gas a Europa, causando daños a nuestros hogares, empresas y la economía en general. Ofgem no tiene más remedio que reflejar estos aumentos de costos en el límite de precios», dijo en un comunicado Jonathan Brearley, CEO de Ofgem.
«LA GENTE MORIRÁ ESTE INVIERNO»
El experto en finanzas Martin Lewis de la consultora, Money Saving Experty, consultado por el programa Today de la BBC y la cadena de radio LBC, advirtió que «la gente morirá este invierno» si no recibe una ayuda para pagar de las facturas de los servicios de energía.
Ya se ha anunciado alguna asistencia financiera por valor de 400 libras por hogar que entrará a partir de octubre, pero las facturas ya superaron lo que se ofrece
También atacó al Gobierno y a la candidata a primera ministra Liz Truss, favorita en la contienda interna del Partido Conservador, por no haber ideado a tiempo un plan para hacer frente a los aumentos a los que consideró «catastróficos».
“Esto es una catástrofe, si no obtenemos más intervención del Gobierno, además de lo que se anunció en mayo. Espero y rezo, quienquiera que sea nuestro nuevo primer ministro, haga algo este invierno porque si no lo hace, la gente morirá debido a estos aumentos en los precios de la energía», alertó.
Lewis también señaló que el límite de precio no es un cargo máximo e indicó que algunas familias, especialmente aquellas con niños discapacitados, podrían recibir facturas que alcanzan las 10.000 libras.
REACCIÓN SOCIAL
Sheila Correll, una mujer de 80 años de Lincolnshire, un condado al noreste de Inglaterra, contó a la BBC que sus ingresos son de 184 libras esterlinas a la semana, y hasta que entre en funcionamiento el nuevo sistema en octubre, está pagando 96 libras esterlinas al mes.
Contó que estaba reduciendo cosas básicas como la comida y el uso de electrodomésticos, incluido tener que lavar a mano.

Kiara Dolan, madre soltera de un niño de seis años, dijo a ITV News que el inminente aumento del precio de la factura de energía la tiene «estresada».
«Va a llegar al punto en que todos estarán endeudados, incluso las personas que están trabajando», aseguró.
«La gente de este país debe hacer frente a todo esto o será la ruina para nosotros. Todo es absolutamente impactante y no se está haciendo nada», manifestó otra mujer a la cadena.
«¡Los únicos que podrán pagar por calentarse y comer serán los ricos! ¡El resto de nosotros tendremos que elegir qué es más importante!», expresó otro usuario.
«INVIERNO DRAMÁTICO»
El director de EDF Energy, Philippe Commaret, aseguró que «la mitad de los hogares británicos se enfrentarán a un «invierno dramático y catastrófico», si el Gobierno no interviene para aliviar el excesivo incremento de las facturas de gas y electricidad de sus viviendas.
Muchos británicos no podrán permitirse este invierno los servicios energéticos suficientes para satisfacer sus necesidades o deberán destinar una parte excesiva de sus ingresos para solventar esos servicios, una situación conocida en Europa como «pobreza energética».
En ese sentido, el ejecutivo del sector aseguró en declaraciones a las cadenas de televisión ITV y BBC, que está «muy preocupado» por los clientes y dijo que el nivel de apoyo que el Gobierno brindó sobre esto, no es suficiente.
“Nos enfrentamos a que en enero más de la mitad de los hogares del Reino Unido sufran una pobreza energética», aseguró.